Gestión avanzada de riesgos
Correlaciones y gestión del riesgo
Los mercados financieros rara vez se mueven de forma aislada. La tendencia de un activo suele repercutir en varios otros, lo que significa que algunos precios suben y otros bajan.
Este efecto se denomina correlación del mercado. Aunque puede ser útil para detectar oportunidades, también puede aumentar el riesgo si no se tiene cuidado. Pero si entiende cómo funciona la correlación, puede dar un paso importante para reducir tu riesgo general.
¿Qué es la correlación de mercado?
La correlación del mercado es una medida que ilustra la cantidad en que los activos se mueven en línea unos con otros. Se puede medir la correlación de mercados específicos, sectores o clases enteras de activos.
La correlación suele medirse en forma de porcentaje. Si dos mercados están correlacionados al 100%, sus movimientos siempre serán los mismos. Cuando uno sube, también lo hace el otro. A esto se le llama correlación perfecta.
Una correlación del 50 %, por su parte, significa que los dos mercados se mueven generalmente en la misma dirección, pero no siempre se suceden al unísono.
Las acciones del mismo sector pueden mostrar tasas de correlación muy altas, lo que puede dificultar la búsqueda de una acción que supere a sus pares. Los pares de divisas también suelen estar muy correlacionados, especialmente cuando se trata del dólar estadounidense.
Tipos de correlaciones
Hay tres tipos de correlación:
- La correlación positiva describe los mercados que imitan los movimientos de los demás.
- La correlación negativa describe mercados con movimientos inversos
- La ausencia de correlación describe los mercados que no tienen ninguna relación.
Por qué son importantes las correlaciones
Las correlaciones pueden tener un impacto significativo en tu nivel de riesgo general y en tus resultados, principalmente porque actúan en contra de la diversificación. Estos puede resultar en que un mercado que se mueve en tu contra afecte a toda tu cartera.
Por ejemplo, si tienes abiertas posiciones cortas en dos mercados con una correlación positiva del 75%, es probable que una tendencia bajista en uno de ellos provoque el mismo movimiento en el otro.
En este caso, te arriesgas a perder el capital asignado a ambas posiciones si una se mueve en tu contra. Por lo tanto, el riesgo total de la operación podría ser mayor que el previsto inicialmente.
Si tienes varias posiciones correlacionadas, tu riesgo global a nivel de cartera podría ser mucho mayor de lo que piensas. Por lo tanto, siempre vale la pena investigar qué mercados están correlacionados, y cuáles pueden contribuir a tu diversificación.
Cómo obtener ganancias de las correlaciones
La volatilidad puede influir en las correlaciones. En épocas de alta volatilidad, los mercados tienden a estar más correlacionados, lo que puede aumentar su riesgo general.
Algunas correlaciones clave del mercado
Algunas correlaciones solo son temporales, otras han durado años y parece que van a continuar. Estos son algunos ejemplos comunes que debes tener en cuenta en tus operaciones.
1. El USD y el oro
Quizá la correlación más conocida de todas sea la que existe entre el dólar estadounidense y el oro. El oro se cotiza en dólares estadounidenses, por lo que su precio depende en gran medida de la fortaleza de la moneda. Cuando el dólar sube, el precio del oro suele bajar: una fuerte correlación negativa.
2. El AUD/USD y el cobre
Muchos pares de divisas están estrechamente correlacionados con commodities. Esto suele ocurrir cuando una economía depende de los productos básicos para crecer. Australia, por ejemplo, obtiene una gran parte de su riqueza de la minería de metales. Por ello, el precio del para AUD/USD puede moverse en función del precio del cobre.
3. El USD/NOK y el petróleo Brent
El USD/NOK, en cambio, tiene una correlación inversa con el precio del petróleo Brent. ¿Por qué? Porque Noruega es uno de los principales exportadores de Brent, que representó alrededor del 18% de su PIB en 2018.
4. Acciones y Commodities
Si una empresa depende de una determinada materia prima para sus operaciones, es muy probable que el precio de sus acciones esté correlacionado con este. Las aerolíneas, por ejemplo, son grandes consumidoras de petróleo. Cuando el precio del petróleo es alto, pueden sufrir, lo que se refleja en los mercados.
Las mineras, por su parte, obtendrán más ganancias cuando los precios de los metales son altos. Algunos traders aprovechan esto para obtener una exposición indirecta a los metales: en lugar de invertir en commodities, compran acciones mineras.